Algunos secretos para seducir a una mujer


Todo el mundo necesita mantener relaciones con el sexo opuesto. Solamente una pequeña parte de las personas no se siente interesada en seducir y tener citas. Pero lo tocante con las relaciones interpersonales suele ser un tema difícil para la gente tímida. Y estas dificultades se acrecientan cuando se trata de encontrar pareja o interactuar con personas del otro sexo.


Imagina la situación de tener ante ti a la mujer o la chica de tu preferencia, toda sensual, provocativa y no atinar siquiera a decirle “hola” debido a la maldita timidez. Al pensar hacerlo la tensión nerviosa alcanza niveles casi insoportables y las palpitaciones amenazan con romperte el corazón en mil pedazos. La seducción, enamorar o “ligar” con una chica se vuelve un asunto demasiado complicado entonces. En vez de ser una fuente de placer y diversión, se torna desagradable. Por eso vamos a tratar la cuestión de cómo vencer la timidez al momento de abordar a una chica.Te preguntas qué hacer con la timidez, con el deseo de conocer chicas y encontrar pareja. Cómo conciliarlos. Mucho puede hacerse al respecto. Veamos algunos consejos:

1. Cambia tu concepción de que conquistar, seducir o ligar chicas es una cuestión de vida o muerte. Te aseguro que no lo es. Puedes decidir hacerlo o no hacerlo en un momento dado. Pero ten esto en mente: No estás obligado a nada, lo más importante es si te apetece hacerlo o no, ante una chica, un lugar y un momento determinados. Si no quieres, no lo hagas, así de simple.
2. La seducción no es una cuestión que debe ser tomada demasiado en serio. Mirándote a ti mismo cuando te aproximas a una mujer o tienes una cita puedes darte cuenta que le atribuyes excesiva importancia. Es por eso que te pones tan tenso. Pero la seducción no es más que un juego, es una tontería para pasar el tiempo. Trata de encontrar su parte divertida, no es más que una broma. Sé juguetón, relájate, diviértete. No busques un comportamiento correcto, lógico, sin errores todo el tiempo. Es lo contrario, lo que divierte a veces es precisamente el desatino, lo absurdo, lo incoherente… No debes temer al ridículo, el ridículo es una de tus mejores armas porque entretiene mucho a la gente (y a las chicas). Úsala intencionalmente.
3. Deja de creer que las chicas no se fijan en ti porque seas poco atractivo. Las chicas en general no se fijan en ningún hombre tanto como nosotros nos fijamos en ellas. Ellas ven la seducción de un modo distinto. Te pasarán mil veces por tu lado sin que noten tu presencia, no importa cuan apuesto puedas ser. Lo normal es que si no haces nada para llamar su atención no la tendrás de manera gratuita. Por eso tienes que tomar la iniciativa de interactuar con ella, ese es el primer paso para seducir a una mujer. Tenlo presente, si no media ninguna palabra, jamás pasará nada entre ustedes.

Relacionarse con las chicas, es aquí donde muchos tímidos se rompen la cabeza. ¿Qué hacer? ¿Qué decirles? “Soy demasiado tímido, mi timidez me lo impide”, se dicen. Como si seducir y relacionarse con chicas o tener una cita fuera tan complicado. Muchos sitios de seducción en Internet tocan ese punto. Sin embargo, proponen estrategias que evidentemente serían muy difíciles de llevar a cabo por personas tímidas.

Es por eso que vamos a revelar una técnica muy cómoda y de muy buenos resultados para la que no importa si eres tímido o no: La técnica de la coincidencia. ¿En qué consiste? Pues en eso mismo, en coincidir con ella en cuantas cosas puedas. Es suficiente que por ejemplo, asistas al mismo gimnasio que tu chica, a las mismas clases, a los mismos lugares, tomes el mismo bus, vayas a los mismos espectáculos, oigas la misma música; comiences a interesarte por sus mismas aficiones, conozcas a las mismas personas, tengas amigos en común, etc.

Debes notar que no se trata de hacer todas esas cosas por ella. Debes encontrar motivos personales para llevarlas a cabo. Llegado a ese punto verás cómo aparecen varios pretextos para dirigirle la palabra. Y lo mejor es que se verá, y será, algo muy espontáneo, sin esfuerzo. Es muy sencillo, solo tienen que mediar algunas palabras y ya estás interactuando con ella. Habrás superado el primer paso.No tendrás así que vencer la timidez porque no habrá prácticamente oportunidad para que se manifieste. Estás haciendo algo muy natural. Lo único que haces es establecer una conversación aprovechando cualquier oportunidad que surja. Mientras más cerca estés y más tengas en común con ella, más probable que ocurra. El contenido de la plática es muy secundario, dependerá de la situación.

Cuando intercambies la primera vez con ella recuerda: No vas a decirle un piropo ni nada de eso, tales cosas exigen demasiado para la timidez. En cambio, le dirás lo que te apetezca, nada más, lo que se te ocurra, una pregunta, un comentario efímero, una sugerencia. Repito: ¡cualquier cosa! Si crees que es tonto tu comentario, recuerda que puede ser una tontería; pero eso es la seducción precisamente, un juego, una diversión, no tiene que ser nada serio lo que se diga.

Otra cosa, no te propongas conquistar, seducir, enamorar ni mucho menos, desde el primer momento. Ella todavía es una desconocida. Solo deseas decirle “algo”, no importa qué, pero nada más. Si logras ese “algo”, entonces has alcanzado totalmente tu objetivo.

Pero bien, supongamos que ya estás departiendo con ella, ya tienes algo que se parece a un diálogo. Repito que no importa que sea un diálogo tonto o tenga pausas. Sencillamente puedes intentar saber su nombre y ofrecerle alguna cosa, que según sus aficiones, pudiera ser de su interés. Eso será un buen pretexto para volverte a encontrar con ella en otro momento. Así podrás tener una especie de “cita” o rencuentro.

Es importante que este primer intercambio no se extienda demasiado. Las conversaciones tienen un comienzo, un punto de mayor interés y luego comienzan a decaer hasta volverse aburridas. Debes terminarlas antes de que se agote la curiosidad.Usa una combinación de excusa e invitación. Por un lado puedes decirle gentilmente que no te es posible seguir platicando con ella en este momento. Desde luego, debes tener una razón convincente, por ejemplo; unos amigos te esperan, debes ir a algún lugar, debes continuar con algo, etc. Le demuestras así que tienes tus propios asuntos. Y le propones sonriente seguir la conversación en otro momento.

Si le ofreciste algo que a ella le interesó y tiene que volver a verte para obtenerlo, pues perfecto. Eso se llama seducir, eso es seducción, haz despertado su interés. Haz conseguido vencer la timidez y el temor a la aproximación. Y ya está, conociste a la chica, ella te conoció, conversaron muy brevemente y quedaron en volverse a ver. Ya no le eres indiferente a la chica que te gusta, ella hasta quiere volverte a ver. Felicidades, la historia ha comenzado.